El diputado Yamil Esgaib enfrenta un escenario político turbulento.
Recientes movimientos dentro del oficialismo sugieren un descontento creciente con su actitud, lo cual ha llevado a considerar su suspensión o incluso la pérdida de investidura.
Aunque inicialmente se discutió una suspensión de sesenta días, la situación ha escalado con sugerencias de algunos miembros influyentes del partido que apuntan a medidas más severas.
Discrepancias y consejos entre aliados
Daniel Centurión, un disidente dentro del partido colorado, ha hecho públicas sus recomendaciones hacia Esgaib, aconsejándole prudencia frente a los desafíos actuales.
En paralelo, figuras como Basilio “Bachi” Núñez y “Nano” Galaverna, también del oficialismo, han manifestado su desaprobación hacia la conducta de Esgaib, marcando una clara división interna.
Repercusiones y posibles cambios
La tensión en el Congreso no solo afecta a Esgaib. Rocío Vallejo, otra diputada del partido, se encuentra en una posición vulnerable debido a su postura crítica.
Los mismos legisladores que buscan la destitución de Esgaib podrían estar considerando aprovechar la situación para remover a Vallejo.
Además, se especula que Julio “Bollo” González podría tomar el lugar de Esgaib, lo cual reconfiguraría el panorama político del Congreso.
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