Choferes irán a paro el 16 y 17 pese a reforma del transporte
La Federación Unitaria de Trabajadores del Transporte (FUTT) confirmó una huelga de dos días para el martes 16 y miércoles 17 de diciembre. El gremio rechaza la ley de reforma del transporte público y afirma que la normativa afecta su derecho a la huelga.
FUTT ratifica la huelga y exige cambios inmediatos
La FUTT resolvió ir a paro el 16 y 17 de diciembre. La decisión surge tras la sanción de la ley que declara al transporte como servicio imprescindible, lo que obliga a mantener un mínimo del 60 % de la flota operativa. Para el gremio, esta exigencia limita medidas de fuerza.
El dirigente Hugo Zayas dijo que no hay margen para negociar. También pidieron la destitución del viceministro de Transporte, Emiliano Fernández.
“Ya recurrimos a todas las instancias… No hubo nada favorable. Solo promesas”, afirmó en Así son las cosas (GEN y Universo 970 AM/Nación Media).
Acatamiento estimado y tensiones con empresarios
El paro iniciará a la medianoche del martes 16. La FUTT espera un 80 % de acatamiento, aunque varios gremios aún no confirmaron apoyo.
Zayas mencionó que desconocen la postura del sector empresarial sobre la ley. Sin embargo, advirtió al Cetrapam:
“Si no nos pagan el aguinaldo, les vamos a denunciar también”.
Reabsorción laboral: cambios incorporados en Diputados
La ministra Claudia Centurión explicó que la ley incorpora ajustes solicitados previamente por los trabajadores. La reabsorción, antes prevista solo para conductores, fue ampliada a mecánicos, administrativos y otros empleados.
Se mantiene la obligación de reabsorber a quienes tengan dos años de antigüedad. Centurión señaló que los operadores no siempre serán dueños de las flotas ni de las guardas, pero sí deberán contar con patrimonio y facturación suficiente.
Garantías laborales y continuidad del servicio
La ministra recordó que el Código Laboral no cambia. Los derechos y obligaciones se mantienen intactos.
“Ellos tienen que ser reabsorbidos y pasar por pruebas de rigor”, afirmó.
El punto más cuestionado por la FUTT es la declaración del transporte como servicio imprescindible, que lo equipara a áreas como salud pública y exige garantizar una operación mínima incluso en emergencias.
¿Creés que la declaración de servicio imprescindible cambia el equilibrio entre usuarios y trabajadores? Te leemos.
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